La Unión Europea está aún lejos de alcanzar los objetivos principales de la estrategia Europa 2020 en cuanto a la disminución de la pobreza y a la creación de empleo.
Desde 2010, año de inicio de Europa 2020, en algunos Estados miembros los niveles de desempleo no han dejado de aumentar y en 2014 la tasa de desempleo en la Unión Europea ha alcanzado el 10,1% con 24,6 millones de desempleados y un número cada vez mayor de trabajadores pobres. Desde 2008, la cifra de personas en riesgo de pobreza o exclusión social ha aumentado 10 millones hasta superar los 122,6 millones. La tasa media de riesgo de pobreza en la UE es del 24,8%, mientras que en el caso de los menores de edad (hasta los 18 años) es del 28%. La tasa de pobreza de las personas con discapacidad supera la media en un 70%.
Para poder alcanzar en 2020 el objetivo de una tasa de empleo del 75%, habría que asegurar un empleo a otros 16 millones de ciudadanos. Según las últimas previsiones de la Comisión, en 2015 la tasa de desempleo en la Unión Europea descenderá sólo al 10,4%, una reducción insignificante. Las elevadas tasas de desempleo en la Unión Europea se deben a un descenso en la producción industrial y manufacturera.
La tasa de desempleo juvenil ha alcanzado el nivel preocupante de 23,3% (media en la UE en 2013) y más del 40% de los jóvenes trabaja con contratos de duración determinada y alrededor del 25% a tiempo parcial. Dicho nivel se debe a la falta de medidas efectivas que estimulen las inversiones públicas en la innovación, la investigación, el desarrollo de las cualificaciones y las competencias profesionales.
El Fondo Social Europeo respalda los esfuerzos para cumplir los objetivos de Europa 2020 a través de medidas para luchar contra el desempleo y, en concreto, el juvenil. Las inversiones de 300 mil millones de euros que prometió Jean-Claude Juncker deberían usarse para alcanzar dichos objetivos.
En las conclusiones del 27 de junio de 2014, el Consejo Europeo destacó que la tasa actual de desempleo de la UE es inaceptable y estableció una agenda estratégica centrada en el empleo, el crecimiento y la competitividad. Los retos demográficos y el envejecimiento de la población seguirán teniendo una gran repercusión en la capacidad de los Estados miembros para poder cumplir los objetivos de la estrategia Europa 2020.
Un mayor crecimiento económico no constituye una garantía de empleo digno ni la disminución de la pobreza o las desigualdades sociales, sino que son necesarias decisiones políticas adecuadas, que no se centren únicamente en el crecimiento económico sino en el reconocimiento de la necesidad de un enfoque inclusivo, sostenible y basado en los derechos.
Cabe recordar la importancia de los interlocutores sociales en lo que respecta a las políticas del mercado laboral. Sus consultas deberían formar parte del proceso. Los Estados miembros tienen que ser más receptivos con las exigencias del mercado laboral, en concreto, garantizándoles fuertes vínculos con el mundo de la instrucción.
Con el fin de aumentar la tasa de empleo al 75%, los Estados deberían mejorar su capacidad de liderazgo, de gestión y de espíritu empresarial entre los jóvenes para permitir que las empresas emergentes se beneficien de los nuevos mercados y puedan aprovechar al máximo su potencial de crecimiento.
Es necesario:
La pobreza, además de representar una lucha diaria para la dignidad y la supervivencia, daña la economía, reduce la demanda, daña el crecimiento del país y afecta negativamente a las finanzas públicas. Según la Comisión, entre 2010 y 2012, la pobreza y la exclusión social han aumentado en los Estados más afectados por la crisis económica como Grecia, Irlanda, España, Italia y Chipre. Por el contrario, han disminuido en Polonia, Lituania y Letonia, mientras que en la República Checa, Alemania, Francia, Holanda y Portugal se han mantenido estables.
Para enfrentarse a la crisis, algunos Estados miembros han aplicado grandes recortes al gasto público mientras que, a causa del aumento del desempleo, ha crecido la demanda de protección social. Muchas familias están experimentando un deterioro en su condición de vida. Las medidas de austeridad han reducido la disponibilidad y la calidad de los servicios públicos, fundamentales para las personas en riesgo de pobreza o exclusión social; el aumento de las tarifas de algunos servicios básicos provocan efectos dañinos a largo plazo en las personas o en su capacidad de participación en la vida social.
Según el comisario europeo László Andor, que intervino durante la conferencia sobre el objetivo pobreza de Europa 2020, el desequilibrio en el nivel de pobreza entre las sociedades de los Estados europeos representa una «amenaza al rendimiento económico de la Unión Económica y Monetaria porque ninguna Unión puede funcionar si sus miembros se siguen alejando de forma progresiva».
El premio Nobel Amartya Sen señaló que hay tres diferentes aspectos en el empleo:
Además, no sólo están los beneficios iniciales de los puestos de trabajo, de la seguridad de ingresos y del aumento de los servicios de más calidad para la comunidad. Existen también muchos beneficios indirectos: los multiplicadores económicos y sociales que conllevan los beneficios directos. Desde el punto de vista económico, la creación de empleo y el aumento de los ingresos del empleo se traducen en posteriores aumentos del gasto privado y en ganancias mayores para toda la comunidad. Los multiplicadores sociales están relacionados con los beneficios para los individuos y la comunidad, es decir, la reducción de la criminalidad, del tráfico de drogas y de las crisis familiares.
La creación de empleo aporta beneficios potenciales como:
Las políticas y las medidas defendidas por las Instituciones Europeas, aunque acogidas y aplicadas escrupulosamente en todos los países de la Unión, junto a una mejora progresiva de la situación social y económica, podrán contribuir de forma positiva para el cumplimiento de la estrategia Europa 2020.
RECOMENDACIÓN:
Nuestro grupo ha debatido sobre los problemas de los mayores y todos hemos coincidido en los siguientes puntos:
Mantenernos activos generosamente para el prójimo también tendrá ventajas para nosotros mismos.
Egidio Ramondetti Delegado italiano